Con una estética cada vez más alejada de lo tradicional, las grandes, medianas y pequeñas empresas buscan, o deberían, estar a la última a la hora de ofrecer un lugar de trabajo óptimo y eficiente.
En LightHouse estrenábamos instalaciones hace un año y hemos vuelto a invertir en ellas para que nuestros agentes inmobiliarios asociados dispongan del espacio más acogedor y práctico para ellos y sus clientes.
Ya nadie piensa que el espacio donde realizamos nuestro trabajo no influya en la calidad del mismo, y por ello el esfuerzo en ser creativos y en buscar espacios atractivos es ya una necesidad. Un buen espacio de trabajo conseguirá que reduzcamos el estrés y aumentemos la productividad, pero mas allá de esto contribuye no solo al bienestar sino a la felicidad laboral.
Las tendencias actuales requieren espacios de trabajo personalizados que además de ser cómodos, potencien la creatividad y aseguren el bienestar en función de la dedicación, de los valores y de la filosofía de cada empresa. Ya no vale la oficina estandarizada.
Beneficios de un buen espacio de trabajo
- Espacio adaptado a personas: contribuye a su movilidad y a la ergonomía que adapta el espacio a la personas, evitando posiciones estáticas.
- Espacios versátiles: puede suponer incluso un ahorro de espacio y una nueva visión de su uso con un espacio mas racionalizado y utilizable. El diseño de los espacios y la elección de mobiliario toman protagonismo frente a la cantidad de metros cuadrados necesarios.
- Comodidad y practicidad: a mayor comodidad, mejor estado de ánimo y mayor rendimiento. Los trabajadores son más resolutivos, mejoran su forma de pensar y a menudo obtienen ideas más innovadoras.
- Atracción de talento: tener la capacidad de ofrecer áreas cómodas y confortables es una ventaja competitiva. Este recurso es cada vez más utilizado por los gerentes, sobre todo para captar y mantener a las nuevas generaciones.
- Mejora de las relaciones: el espacio de trabajo tiene la capacidad de repercutir en el estado de ánimo de los trabajadores y ello repercute en el modo de relacionarse con sus compañeros. Los nuevos espacios suelen fomentar una forma de trabajo en equipo.
- Sentido de pertenencia: el equipo para el que se han adecuado espacios, siente como suyo dicho espacio y además la marca.
Es importante no perderse solo en el factor estético de la oficina. Cualquier elemento, por pequeño que sea, debe cumplir una función más allá de la decoración. Si un elemento es atractivo pero no es útil, entonces es mejor no utilizarlo. Así, el diseño de espacios de trabajo no trata de convertir oficinas feas en oficinas bonitas, si no en oficinas que ayuden a las empresas a lograr sus objetivos.