La Ley de Arrendamientos Urbanos establece en qué casos será el casero y en cuáles será el inquilino quien deba hacerse cargo de las reformas, las averías o los desperfectos que pueden ocasionarse en una vivienda alquilada, mientras dure el contrato de alquiler.
El artículo 21 de la LAU indica que «El arrendador (casero) está obligado a realizar, sin derecho a elevar por ello la renta, todas las reparaciones que sean necesarias para conservar la vivienda en las condiciones de habitabilidad». Eso sí, también indica que «Las pequeñas reparaciones que exija el desgaste por el uso ordinario de la vivienda serán de cargo del arrendatario (inquilino)». Es por ello por lo que, aunque en este artículo detallamos algunas reparaciones que generalmente debe encargarse el casero, hay que tener en cuenta otras variables como el importe de la reparación, el tiempo que lleve alquilada la vivienda, la vida del aparato a arreglar y otros parámetros para decidir, en caso de disputa, quién debe hacerse caso de cada reparación.
Reformas a cargo del inquilino
El inquilino deberá responsabilizarse de aquellas reparaciones causadas por el uso diario de la vivienda y, en consecuencia, de su desgaste. Sin embargo, siempre deberá comunicárselo al casero por escrito, para que éste dé su consentimiento; de lo contrario, no los podrá llevar a cabo.
Reformas a cargo del casero
Por su lado, el casero deberá hacerse cargo de todas aquellas reparaciones necesarias para mantener la vivienda en perfectas condiciones de habitabilidad. Esto incluye las averías o problemas derivados del paso del tiempo y no del uso ordinario de la vivienda.
Reformas que si o si corresponde al casero
Ahora que ya sabemos de qué debe encargarse cada una de las partes del contrato de arrendamiento, veamos 8 reformas que irán a cargo del casero y por las cuales, en ningún caso, podrá elevar la renta del alquiler a sus inquilinos.
- Reparación o sustitución de la caldera
El mantenimiento o la sustitución de la caldera en los pisos alquilados es una de las reparaciones más habituales que corren a cargo del casero. Además, debe llevarse a cargo lo antes posible, dado que trata de uno de los elementos fundamentales del inmueble.
- Reparación o sustitución de los aparatos de aire acondicionado
Si en el momento de alquilar la vivienda ya había aparatos de aire acondicionado, en caso de que alguno de ellos falle o se estropee el casero deberá proceder a su reparación o sustitución. Aunque en este caso, como analizamos antes, la avería debe ser por el paso del tiempo y no por el uso cotidiano del aparato.
Si, por el contrario, no había aparatos de este tipo y el inquilino decidió instalarlos por su cuenta -siempre con el permiso por escrito del casero- su reparación irá a cargo del primero.
- Correcto mantenimiento de las tuberías
Mantener las tuberías en buen estado también es responsabilidad del casero. Éste deberá hacerse cargo de las reparaciones o sustituciones parciales o totales de los elementos componentes de instalaciones de conducción del agua y de los desagües.
- Correcto mantenimiento del cableado
Otro de los problemas que pueden aparecer en una vivienda alquilada son todos aquellos que tienen que ver con el sistema eléctrico y el cableado. De hecho, dado que no están a la vista, suelen ser de los más habituales y de los más peligrosos.
Dado que tienen que ver con las instalaciones eléctricas de la vivienda -y, por lo tanto, de su habitabilidad- irán a cargo del casero. Las más habituales suelen ser subidas de tensión y cortocircuitos.
- Correcto mantenimiento de la calefacción
El correcto funcionamiento de la calefacción, igual que el de la caldera y del sistema eléctrico en general, es otra de las obligaciones que tendrá el casero y que tendrá que subsanar lo antes posible. Y es que, de nuevo, condiciona la habitabilidad de los inquilinos.
- Reparación o sustitución de los electrodomésticos
El tema de la reparación o sustitución de los electrodomésticos en las viviendas de alquiler es uno de los que genera más controversia entre las partes firmantes del contrato de arrendamiento.
Y es que es difícil saber si se ha estropeado por el paso del tiempo o por un mal uso por parte de los inquilinos. En cualquier caso, si ya estaban en el momento en los que éstos entraron, el casero deberá encargarse de su reparación o sustitución.
- Levantamiento o rotura del suelo, el techo y/o las paredes
Todos los elementos que forman parte de la construcción de la vivienda, como el techo, las paredes o el suelo, deben conservarse siempre en buen estado, dado que tiene que ver con la habitabilidad del inmueble. Por ello, y siempre que no se deba a un mal uso por parte de los inquilinos, irán a cargo del propietario.
Estos problemas suelen generarse por el paso del tiempo o bien por filtraciones de agua, que pueden acabar generando humedades en la vivienda. La pintura del inmueble también se considera una reparación necesaria derivada del uso habitual, por lo que debe asumirla el casero.
- Obras de conservación del inmueble
Finalmente, es importante aclarar que el casero deberá responsabilizarse de todas aquellas reparaciones necesarias para prevenir posibles daños en el inmueble, entre las que destacan la sustitución de persianas, puertas y/o ventanas, o la reparación de la fachada, entre otros.
¿Cómo aseguramos desde LightHouse una gestión segura del alquiler? En LightHouse Centro Inmobiliario contamos con el Servicio de Arbitraje Notarial y nuestros contratos de alquiler llevan adheridos un convenio en el que se asegura una gestión segura y profesional para todas las partes.
Si deseas recibir más información, no dudes en contactarnos.
- Fuente : Fotocasa, LAU (Ley de Arrendamiento Urbano)